lunes, 27 de agosto de 2018

Paseas mis temores, con la derecha los sacudes para enardecerlos, y con la izquierda tomas mi pecho y lo estrujas para quebrantarlo aún más. Seré perfecta para ti cuando no sepa como armar mis pedacitos. Tomo uno y lo embono con otro más grande, luego me miras y se desmoronan, y comienzo de nuevo, primero armo mis pies, luego la cadera porque es más fácil, pero al llegar al pecho comienzan a ser más pequeños y deformes, ahí es cuando no sé cómo continuar,  porque tu mirada y esas cosas que me encantan, me destruyen. Aquí es qué no se si continuar.