domingo, 22 de abril de 2012

Ella es Saraí.


Era el día, varías veces nos ha tocado pasar por esto, una despedida más, quizá la más triste porque sabemos que nos necesitamos más de lo que creemos, y nos tenemos más lejos de lo que queremos, 2028 kilómetros nos separan de nuevo, al final de la noche mi mejor amiga y mi mejor amigo bailando y platicando cómo si se conocieran de años, fue un sueño hecho realidad. Desde la primaria juntas, en la secundaria nos tocó en el mismo grupo, pero yo me salí y ahí nos perdimos la pista un tiempo, luego en la prepa fue cuando la amistad se convirtió en lo de ahora, hace siete años decidió irse, justo cómo hoy. La madrugada llegó y la despedida también, la primer parada Guadalajara, y  su camión salía en unas dos horas más, ella fue la primera, y cómo pocas veces, yo comencé a llorar también ( en público... porque yo solita lloro a cada rato), los abrazos, los consejos... los adiós concluyeron estos meses en que nos dimos cuenta que nosotras hemos cambiado mucho en este tiempo, y el cariño también; crecío. Tijuana no me gusta, está tan lejos.