Aunque aveces así lo parezca, mi corazón no es de hule, y me grita desesperado un descanso.
No me atreví antes a pulsar "enviar", hoy no tiene sentido, ni destino, caducó.
R.I.P.
No me atreví antes a pulsar "enviar", hoy no tiene sentido, ni destino, caducó.
R.I.P.
"Si me pidieras una razón, te debería, porque puros impulsos son lo que últimamente me controlan, o incontrolan, mejor dicho; no hay instintos que puedas saciar, no te tengo junto a mi, hoy que tanto te aclamo, no estás, cómo antes tampoco estuviste; comienzo a creer que te gusta jugar, lástima que ya no esté para eso, estoy para esto, estoy para estar, por si quieres, por si me quieres aquí estoy, me oferto para ti, tómame o déjame, pero déjame bien, no hagas cómo que sí y luego siempre no, o viceversa. Ándale pues… vete, vete, vete, pero bien lejos, allá donde tu recuerdo no tenga camino a mi mente; y si te quedas… quédate todo… no pedacitos, no sobras para mi, porque yo, voy completa… y si no, pues mejor nos vamos olvidando, nomás que dicen que “Hay que tener cuidado a qué y a quién olvidas, porque ya encaminados en el olvido, no hay marcha atrás”. Es una propuesta, la más indecorosa que te haya hecho, y te lo propongo porque aún siendo incrédula en la mayoría de las cuestiones, creo en nosotros. "
Con esto concluyo con ésta ola de post que ha estado agobiando a éste, su blog, desde hace unos meses, también le agrego unas lineas que me encantaron, y así encantada, aseguro que la peor batalla que he enfrentado, es conmigo misma, al pensar que alguien más era el enemigo.
"Guiño los ojos esperando que este sol tardío me caliente.
Estoy en esta silla de enea que me acompaña todas las tardes.
No, jamás me sentaba y nunca supe apreciar lo que la vida me regalaba.
Aquí aprecio lo que me calienta y olvido mi pasado.
Durante unos segundos siento que la modorra me invade y dejo que esta efímera felicidad descanse.
Voy dejando que los recuerdos que me angustian se deslicen sobre mi frente con las gotas de sudor y ahora, apoyado en la pared (yo que tantas veces caí al fondo del precipicio), descanso sobre dos patas de mi silla y guardo un fino y delgado equilibrio."
Anonimo